Está pasable para echar un rato, no es la bomba, tampoco insufrible como otras. Ocurre que huele mucho el inclusismo forzoso que está llenando todo hoy, sobretodo el cine, lo que hace una vez más de esta historia algo no creíble, y te limitas a verla sin estar nunca metido del todo en la peli y su trama, porque todo el tiempo te recuerdan que es propaganda, sexista y racista. De haberse tratado con normalidad hubiese ganado mucho. Quise darle otra vez oportunidad a una peli de los últimos 4 años para ver si me convencía de que estoy equivocado, y resultaba ser una película como las de siempre, normal, pero no, no hay manera, tengo que limitarme a ver el cine de hace 5 años para atrás para que a los 10 minutos de película no acabe quitándola indignado de mil maneras.